El pasado viernes se dio la magia de la enseñanza. Todo comenzó en una sesión de Educación Física de segundo, donde se planteaba el juego libre reglado y social. Los alumnos usaban el material para crear ambientes y asumir roles, como juego espontáneo. Fue al ver el resultado tan sorprendente cuando vimos la posibilidad de introducir esta práctica indagación y creativa en la siguiente hora de clase con el nivel de 5 años, en psicomotricidad.
Le pedimos a tres alumnos que hiciesen de guías para los más pequeños que rápidamente adoptaron los roles y usaron los materiales y espacios ya creados. Habían construido un restaurante con ladrillos de colores y icas y servían "comida" en otra zona de bancos suecos y ladrillos.
En otra zona Habían creado un escenario y con conos y picas Habían hecho los micrófonos y enfrente unos asientos para el jurado de un concurso de cantantes.
Otra zona era "el circo" donde había distintas opciones de hacer equilibrios con raquetas, pelota y picas.
La última zona era un ambiente de acampada con una cabaña de ladrillos y todo lo necesario dentro, representado por distintos objetos y materiales usuales en educación física.
Fue una gozada verlos fluir por los distintos ambientes y zonas y observar como interaccionan entre ellos, creaban, inventaban y además, escuchaban a sus compañeras de solo dos cursos sobre el suyo.